Existe un premio que patrocina Georgia y que lleva el nombre de Nona Gaprindashvili. Premia la suma de los puntos masculino y femenino. La propia Nona debía entregarlo a los rusos. Un fallo de protocolo causó que no se llamase a Nona y que Campomanes lo entregase al equipo ruso absoluto (sin llamar al femenino). Ello encolerizó al georgiano Zurab Azmaiparashvili, vicepresidente de la FIDE.
En lugar de actuar con diplomacia para conseguir una rectificación, protestó airadamente y se rió sarcásticamente. Tal vez insultó a los organizadores. Su actitud desestabilizaba la ceremonia. Se le indicó que no molestase más y esperara al final para plantear cualquier reclamación. Los efectivos de seguridad le indicaron que se sentase...
Cerca del final intentó acceder al escenario. Fue interceptado por un agente de paisano, discutió airadamente con él. Varias personas cercanas han contado que terminó dando un cabezazo al agente. En el tumulto que siguió se necesitaron cuatro personas para reducirlo en el suelo y, hasta lograr esposarlo, recibió algún golpe. Su esposa se puso a chillar de forma histérica mientras otro policía le impedía acercarse, sin violencia alguna, a donde estaba su marido. Lo cuento tal y como lo presencié desde la primera fila del piso superior. No vi el cabezazo porque yo estaba a su espalda y creí que sólo empujaba con violencia al agente.
Al día siguiente me llamó extraordinariamente la atención ver en las fotos de la prensa dos fotos de los primeros momentos, atención, una es de antes y la otra después del cabezazo. En ambas su esposa está grabándolo todo. Es imposible que mi mujer esté discutiendo o haya sido agredida y que yo siga grabando...
¿Estamos ante una provocación premeditada de Zurab?. Me temo que sí, aunque no previó sus consecuencias.
En el 2000 se concedió la Olimpiada a Menorca. En el 2003 Calviá asumió el testigo. Ha faltado tiempo y medios para obtener un resultado brillante. Si la inauguración fue excelente, la clausura tuvo muchos fallos protocolarios. Desde el primer momento la FIDE pidió cosas ilógicas y obstruyó la marcha de la Olimpiada al no ser atendidas. Los organizadores tampoco cubrieron algunas peticiones razonables.
Sin embargo el ataque de algunos dirigentes de la FIDE a los organizadores en el 75 Congreso rezumaba odio y maneras de dictadores insatisfechos. Era injusto y desproporcionado y así lo percibieron la mayoría de los países latinos.
Calviá salvó la Olimpiada que los políticos menorquines habían hundido. Lo han hecho poniendo mucho esfuerzo, buena voluntad y sorteando la escasez de medios. Pero a los delegados de la FIDE les importa más que les den el visado enseguida, que lo recojan en el aeropuerto (aunque le hayan dicho que si llega en medio de la Olimpiada no tiene ese derecho), que le pongan agua en su reunión, que no le cobren la bebida en la comida o que le traduzcan el ruso porque no sabe inglés (aunque en otros sitios no haya existido esa traducción ni aquí se haya prometido). Al árbitro destacado le importa más que, faltando dos días, le paguen dinero de bolsillo aunque haya recibido una carta en la que no se contempla ese derecho.
Que el arbitro principal amenace primero, e intente después, impedir la retransmisión de internet de las partidas de España es motivo de cese (en una organización democrática obviamente).
Entre el jueves y el viernes asistí al 75 Congreso de la FIDE. Nada menos que 13 horas. Acompañé a Tony Ayza y Ramón Padullés. Javier Ochoa tuvo que ausentarse en algunos momentos. Las dos características principales fueron: la dificultad para debatir y la falta de democracia para decidir.
Recibir en fotocopia los textos (¡308 folios!) a aprobar instantes antes de votarlos es una táctica usual de las organizaciones pseudo dictatoriales. Dar pocos segundos para hablar (interrumpiendo) las intervenciones críticas, votar en ocasiones de forma poco organizada o suspender votaciones ya iniciadas, confirman la impresión antes expresada. Obtener la primera opción para organizar un torneo FIDE suele ser igual de fácil que pedir una tapa que acaba de salir de cocina. Uno levanta el brazo y ya está. Luego seguirá un pequeño desembolso formal y a negociar.
Intentar aprobar cambios capitales en el Handbook (electorales, de admisión y exclusión de miembros, etc.) cuando el 60% de los delegados se ha marchado es sintomático.
Kirzan Iliumyínov parece desempeñar una función de Jefe de Estado más que de Jefe de Gobierno. Ese puesto es el de Giorgios Makropoulos. Él se encarga con razonable eficacia de que toda la agenda del Congreso se cumpla. Pero en el camino no sólo corta las propuestas malas o que suponen pérdidas de tiempo sino también las buenas que le perjudican. O eres un delegado afín o no lo eres. En el segundo caso estar en el programa de ayuda al tercer mundo o aspirar a organizar una prueba será mucho más difícil. De hecho España logró la Olimpiada tras salvar una candidatura casi inexistente de China con la que la FIDE pretendió impedir el proyecto español.
Hay quejas. Hay personas que se sienten estafadas porque la visibilidad en las gradas era muy limitada o por otras cuestiones.
Mi acreditación no permitía el acceso a la sala. Entendí que no procedía la presencia de personas ajenas a los matches en un espacio escaso y no pedí ese privilegio. Luego me comentaron que fui de los pocos en no presionar para ello. Aún con prismáticos y auriculares no era muy interesante estar en las gradas. Pasé poco tiempo allí.
¿Decepcionado?. Había una docena de stands y pude comprar libros, sellos, sudaderas u objetos curiosos. Podría haber pedido autógrafos a la constelación de estrellas presente pero no me gusta. Disfruté escuchando a Amador Rodríguez comentar con excelente juicio las partidas (preferentemente las de España A), visité al menos dos veces con calma y una sin ella la exposición de Esquizofrenia Chess de Goyo Hernández (realmente excelente aunque él me confesara que sólo había podido traer una pequeña parte), aprecié la calidad del trabajo del jerezano Antonio Guerrero (aunque al no estar iluminado, parecían más la decoración del hotel que la obra expuesta de un artista), charlé con muchos conocidos a los que apenas veo desde que juego poco y escribo demasiado, asistí en respetuoso silencio a análisis post mortem, hasta navegué un ratito con algún ordenador. Me monté en los autobuses mezclado con gente variopinta. Estuve una mañana en el torneo de blitz y una noche en el de aficionados. Disfruté charlando con ajedrecistas en un pub cercano al hotel.
Como había una andaluza reconozco que era fan de España B. He podido conocer mejor a otros españoles o descubrir personas fantásticas como Rubén Felgaer. Hay fotos de Paco Vallejo en plan karaoke que valen un Potosí. Al final no me enteré si la mascota de Patricia Llaneza entró en la sala de juego el día de su cumpleaños; hubiera causado estragos....
¿Qué pudo estar mejor?. Si, tal vez monitores en el hall, tal vez un boletín que poder comprar, tal vez....
Supongo que será la única Olimpiada que veré (con Makro y Cía tal vez la última prueba FIDE) e intenté disfrutar de todo lo positivo.
Sé que hubo problemas en el arranque y que se habían solucionado cuando llegué. El trabajo de Antonio Rami, Marcelino Sión, Santi Andreu, Jesús Mena y muchos otros fue ingente y quiero destacarlo aquí.
Disculpen, he olvidado lo negativo.