Reflexiones en torno a la Asamblea de la Federación Catalana

 

De lo primero que nos hemos de felicitar todos es del aumento de clubs que participaron en la Asamblea, 49 según los últimos datos que se dieron, aunque posiblemente sean algunos mas.

En el haber de la junta, su capacidad de asumir algunas propuestas de los clubs, e incluso su capacidad para reconocer errores y rectificar, como en el caso de la obligatoriedad de utilizar los desempates oficiales en los Open, donde la Junta apoyo la derogación de uno de sus acuerdos, ante la sorpresa de alguno de sus miembros. También hay que poner en este apartado, la capacidad de generar ilusión con el nuevo proyecto de sede, que la asamblea premió con un encargo, para que la junta estudie bien los números de la operación y convoque una asamblea extraordinaria para la aprobación del proyecto si este es viable.

También recibió una nota de notable alto en las votaciones de los informes el de Ajedrez Base, cuya comisión debería salir reforzada, a pesar de haber perdido algunas de las propuestas que presentaban, y a pesar de haber escuchado algunas críticas. Pero la línea de trabajo es buena. y solo hace falta que la federación reestructure sus presupuestos para no dejarla sin gasolina. Un consejo no obstante a los miembros de la Comisión, vuestro esfuerzo es muy loable, pero hay mucha mas gente trabajando por el Ajedrez de base en Catalunya y sería bueno establecer canales para escuchar también sus opiniones.

En el debe, la no presentación a votación de las propuestas que no les gustaron de los clubs, por no alcanzar ese 10% de apoyos que marca la Llei de l’Esport de la Generalitat, y que en muchos casos representa una barrera infranqueable para muchos. Si en nuestra federación reunir los 15 apoyos cuesta un mundo, no queremos ni imaginarnos que pasa en federaciones como la del Fútbol, con muchísimos mas clubs, donde ese 10% debe hacer imposible el poder  presentar propuestas en la asamblea. En todo caso es una muestra de desconfianza hacia los asambleístas, ya que si las propuestas eran descabelladas, ya se hubiesen encargado ellos democráticamente de rechazarlas. También hay que destacar el varapalo que sufrió el informe del Comité de árbitros, que no se aprobó  y el divorcio existente entre algún miembro de la Junta y su presidente, que se materializó en la asamblea en continuas descalificaciones, entre el sr. Ona y el sr. Flores. Un consejo al sr. Ona, cuando no se esta de acuerdo con la gestión de una junta lo mas apropiado es dimitir como miembro de la misma.

Y por ultimo destacar la ovación de la tarde, que se la llevó el ex presidente de la Federación sr. Casajoana, cuando rechazó la medalla de la Federación que le ofrecía la Junta, por entender que llegaba tarde y mal, y comentar en tono jocoso que esperaría 20 años a que otro presidente se la quisiese otorgar.

Toni Ayza